Principios Pluralidad
En las Líneas de Fondo de Gesto por la Paz se decía “…nuestra sociedad está necesitada de una carga de aliento ético, frente a las actitudes de intolerancia, dogmatismo, indiferencia y desilusión política, hay que cultivar otras de diálogo, aceptación del pluralismo existente y movilización”.
Desde los inicios, Gesto por la Paz realizó un reconocimiento y una defensa de la pluralidad de la sociedad vasca. Una pluralidad que era un elemento enriquecedor y no un problema que hubiera que superar. Cada uno de los sentimientos identitarios existentes debía tener cabida con la única limitación de que su defensa se hiciera desde el escrupuloso respeto a los derechos humanos y a los principios democráticos.
Sin embargo, a partir de 1995 y especialmente en los primeros años del 2000, la violencia terrorista evidenció un especial interés por reflejar una única visión de la sociedad vasca; esto es, pretendía uniformar la imagen y el ser de la sociedad vasca. Además del asesinato, una de las herramientas que utilizó fue la violencia de persecución. Muchas personas tenían su libertad inaceptablemente mermada por las amenazas y las coacciones. Las respuestas que se daban desde el ámbito político se caracterizaban por la división y el desencuentro. La situación de crispación era muy preocupante.
En abril de 2003, Gesto por la Paz lanzó una ‘Declaración en favor de la libertad y la convivencia’ para la que se recogieron miles de adhesiones de la ciudadanía. Esta declaración y el acto que se celebró el 29 de abril en 2003 en Durango, concretaron, en ese momento crítico de elecciones fuertemente coaccionadas, toda una ideología de defensa de la pluralidad como un elemento identitario y enriquecedor de la propia sociedad. La pluralidad no era un problema que hubiera que superar. Todos los sentimientos identitarios debían tener cabida, sin coacciones ni amenazas, solo con la única limitación mencionada anteriormente. En este sentido, durante los años 2003 a 2005 se realizaron varias charlas-debate sobre el pluralismo de nuestra sociedad.
La búsqueda de los mayores consensos posibles, la defensa de la pluralidad enriquecedora de la sociedad y la clara separación entre violencia y política fueron los principios que Gesto por la Paz consideró irrenunciables en su aproximación a las diferentes propuestas políticas que se iban formulando, entre las que destacó la Propuesta de Estatuto Político de la Comunidad de Euskadi (2004), más conocida como Plan Ibarretxe.
Durante 2007, Gesto por la Paz organizó charlas en las tres capitales de la Comunidad Autónoma Vasca (CAV) con el título ‘¿Tiene precio político la paz?’ con el fin de hacer hincapié en la idea de que no podía haber ninguna concesión política a cambio del abandono de la violencia.
